Después de las vacaciones de Navidad, volvemos al cole con
muchas ganas de empezar. Hemos venido muy ilusionados porque Papá Nöel y los
Reyes Magos muchos juguetes nos han dejado. Aunque también nos han traído un
poquito de carbón, pero del ¡dulce¡, jejeje.
Esta semana para nosotros ha sido un poco dura: de nuevo volvemos a madrugar, teníamos mucho sueño, queríamos estar un poco más de tiempo en casa
disfrutando de nuestros juguetes, y todos los días hemos tenido que calentar
las manos porque las teníamos muy cansadas para trabajar. Pero también teníamos
muchas ganas de volver para ver a nuestros amigos y a nuestra seño, y contarle todo lo que hemos
hecho durante todos estos días.
Además, este viernes fue un día de lo más divertido y mágico
en el cole.
Para empezar pudimos llevar a clase un juguete, para enseñárselo
a nuestros compañeros, y jugar un ratito en clase. Nos divertimos mucho. Mirad,
qué cosas tan chulis nos trajeron:
Y poco después no os podéis imaginar lo que nos encontramos
en la clase. ¡Había una sorpresa! Nos pusimos locos de contentos, porque habíamos
pedido a los Reyes un parchís y una oca para jugar, pero… parece que este
regalo no tenía forma cuadrada. ¡Se habrán despistado estos Reyes! Ya buscaremos
por todo el cole, por si acaso se han equivocado de lugar.
Estábamos expectantes. ¿Qué sería?
Tocamos el
paquete, era pequeñito y blandito. Podría ser: una manta, ropa para los
muñecos, un traje, telas, algodón, … queríamos abrirlo ya, pero… y ¿si
explotaba? ¡Ahhhh!, corrimos para el aseo, nos pusimos debajo de las mesas… No
sabíamos qué podría pasar. Entonces nuestra seño nos ayudó a abrirlo despacito.
Empezamos a quitar el papel poco a poco. Se veía algo verde, triángulos rojos,
una mano…. ¡gritábamos más! ¿Sería el monstruo de colores?, pero no. Hasta que
de repente salió muy tembloroso y asustado un…. DRAGÓN. Era un bebé dragón. Nos
abalanzamos todos sobre él, y todavía se asustó más. Entonces la seño le puso
una manta para que no pasara frío, y dejó que poco a poco el dragón, que
parecía un dinosaurio, pudiera hablar.
Para que no tuviera miedo, le dimos todos un abrazo y un beso.
Hicimos mil hipótesis y conjeturas de cómo el dragón había
llegado hasta aquí. Nuestra seño nos preguntó ¿Que qué sabíamos de los
dragones?: que volaban, que tenían alas, que eran muy grandes y tenían unos
colmillos muy afilados, que vivían en cuevas, que echaban fuego por la boca…
Le preguntamos al dragón si sabía volver a casa, y como nos dijo que
no, decidimos quedárnoslo en el cole para cuidarlo hasta que vinieran a
buscarlo, y así podríamos aprender muchas cosas más sobre él.
Le pusimos de nombre drago dino “drilo” y también propusimos
que cada día se podría ir con cada uno de nosotros a casa para que conociera a nuestra
familia y nuestro pueblo.
Nos pusimos locos de contentos. ¡SE QUEDA CON NOSOTROS!.
Y tal fue nuestra sorpresa, que el dragón no iba a estar
solo. Pues no sabemos cómo, sus hermanitos habían aterrizado también en la
clase de la seño Pepi y la seño May….
¡Pronto os daremos más noticias de esta aventura!
Queridos papás y mamás necesitamos vuestra colaboración y ayuda para buscar información y a traer muchas cosas al cole sobre este proyecto que vamos a trabajar: En lo alto del castillo.